Asociación, club, sociedad o capítulo son algunos de los tantos nombres con los que se les conoce a las diferentes agrupaciones estudiantiles dentro de las universidades. Son redes de estudiantes que representan a una sociedad técnica en específico o a un cierto número de personas en diferentes escalas, van desde solo representar a la universidad hasta representar a un país.

Sus beneficios son bastos, pues, dentro de estas agrupaciones, los estudiantes fomentan el intercambio de conocimiento y experiencias a través de un sinfín de actividades de carácter académico, social, cultural y deportivo, siempre en un espacio de sana convivencia. Además de esto, tienen la oportunidad de obtener un desarrollo integral que ayudará a la formación de su perfil profesional, gracias a que en las actividades donde participan se convierten en un espacio para los jóvenes pueden mostrar sus diferentes facetas y forjar un carácter que incidirá en su futuro.

La participación dentro de estas agrupaciones les da la oportunidad de convivir con diferentes personas de las cuales pueden aprender e inspirarse, gracias a que se deja de lado la competencia tóxica y se enfocan en la creación de lazos de amistad para seguir mejorando, no solo como personas sino como gremio.

Formar parte de una agrupación estudiantil es una experiencia que todo estudiante durante su paso por la universidad debe de vivir, si no existe una en tu universidad puedes ser tú quien la inicie apoyándote de tus directivos y tus compañeros de escuela, y si ya existe una, no dudes en integrarte.

En mi paso por algunas de estas agrupaciones estudiantiles me llevo gratas experiencias y grandes amigos de distintas partes de México. Sin duda fue un parteaguas durante mi vida universitaria ya que en lugar de solo dedicarme a asistir a la escuela, me dio la oportunidad de ver y experimentar cosas que de otra manera hubieran sido imposibles. Me enseñó a ver el potencial y la energía que tienen los jóvenes de México y del mundo para hacer que grandes cosas sucedan para el bien de nuestra sociedad y para el bien de nuestro gremio, que para mí fue el de ingeniería civil.

Uno de los eventos que más me marco fue el 1er Vínculo Comunitario Latinoamericano, que se llevo a cabo en Celaya Guanajuato en 2018 organizado por la Asociación Nacional de Estudiantes de Ingeniería Civil (ANEIC MX) y la Asociación Latinoamericana de Estudiantes de Ingeniería Civil (ALEIC). Este evento tenía el propósito de poder reunir a muchos estudiantes de Latinoamérica y brindar apoyo a comunidades marginadas, a través de diferentes proyectos. La razón por la cual este evento fue tan importante es que logró sembrar un germen de cambio en las generaciones venideras. Además, esta iniciativa se logró replicar en otros lugares de Latinoamérica y hacernos ver que lo importante no es un yo, sino un nosotros.

Actualmente participo en la embajada de ANEIC México ante la Asociación Internacional de Estudiantes de Ingeniería Civil (IACES por sus siglas en inglés) y puedo percatarme que todos los años invertidos por otros estudiantes para hacer crecer estos grupos no son en vano. Aún hay mucho por lo cual seguir trabajando y los jóvenes y los mexicanos somos una pieza clave para poder seguir creciendo todos juntos. Espero que aquellos que puedan leer este pequeño escrito puedan animarse a ser parte de este cambio.

Vínculo Comunitario 2014, Jornada Nacional Durango ANEIC

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