Se tiene conocimiento de que los frutos de la planta del café (cafetos), proceden del Norte de Etiopía, en el Oriente de África1. Con el paso del tiempo y los intercambios mercantiles, el café es una de las costumbres más arraigadas en el mundo occidental.
Su llegada a México fue en el año de 1976 a la región de Córdoba, Veracruz, y aunque no hay una claridad en las fechas registradas, el café es una bebida que llegó para quedarse. En México la producción de café se extiende a 12 estados de la república, los cuales se agrupan en cuatro regiones, con características propias y con las condiciones necesarias para la producción de un café de calidad, según la Revista Claridades Agropecuarias2.
Hoy, el café es un cultivo estratégico de México, su producción emplea a más de 500 mil productores. El principal productor es el estado de Chiapas, el que aporta el 39 % del volumen nacional, seguido de Veracruz con el 30 % y Oaxaca con el 13 %. Otros estados productores que participan en la producción de café son Puebla, Guerrero, Hidalgo, Nayarit y San Luis, esto, según los datos de Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria del 2018 (CEDRSSA)3.
Café molido | Café Soluble |
Se elabora a partir de granos de alta calidad. Mantiene todas sus propiedades al pasar por un proceso de cosecha y elaboración natural. Conserva un alto porcentaje de sustancias como los antioxidantes. | Se mezclan granos de alta y baja calidad. El proceso implica el uso de químicos para su producción que ayudan a preservarlo por más tiempo. Sus niveles de antioxidantes son acompañados de elementos químicos por el proceso al que se somete. |
En México el café soluble domina el consumo de la venta minorista, y es considerado una fuerte costumbre. Sin embargo, el consumo del café molido ha crecido de forma relevante, pues los consumidores se han adentrado más a conocer las diferencias dentro de estas dos formas.
En la sociedad mexicana es muy común tomar café para el desayuno, por la tarde con los amigos y en ciertos casos por la noche. El café soluble es el más consumido por las familias mexicanas, llegando a ser nombrado el “Rey”4 debido a su accesibilidad en precio por taza y practicidad en comparación con el café molido. Así mismo, el café molido está adentrándose a los hogares de forma gradual4.
Actualmente hay una tendencia por buscar alimentos y bebidas más saludables, pues ciertas enfermedades como la diabetes y la obesidad están a la orden día. En el caso del café, estamos hablando de un producto natural y libre de químicos, en este sentido el mercado del café molido puede llegar a un mayor número de consumidores, pues este se puede tomar sin azúcar además de tener pocas calorías4.
Pero para lograr que el consumo de café molido acreciente, es necesario desaparecer la idea que se tiene sobre el efecto dañino del café y la cafeína. Diversos estudios han determinado que el consumo del café o de cafeína, tienen más efectos benéficos que perjudiciales, pues el café aporta sustancias como el cafestol, el kahweol, el ácido clorogénico a los cuales se les atribuye propiedades antioxidantes5. Aunque la cafeína es uno de los componentes más conocidos, dentro de una taza de café se pueden encontrar otros elementos como la vitamina B3, magnesio y el potasio6.
Así mismo hay que resaltar que la ingesta moderada resulta beneficiosa, pues el café es un excelente estimulante, da energía, es diurético, laxante y cicatrizante si se aplica tópicamente sobre heridas cutáneas6. Por otro lado, existen algunos beneficios menos conocidos, como sus efectos en la prevención de la diabetes, algunos tipos de cáncer, favorece a la presión arterial y se ha demostrado que reduce la posibilidad de adquirir enfermedades neurodegenerativas como como el Alzheimer o Parkinson6.
La recomendación de algunos investigadores6 sobre el consumo de cafeína es de hasta 300 mg al día, es decir, entre tres y cuatro tazas de café (de 100 ml cada una) para que esta bebida no genere un riesgo. Ya que, si bien el café tiene beneficios, el exceso de este puede traer efectos negativos como: la irritabilidad, el insomnio, el dolor de cabeza, palpitaciones, entre otros menos conocidos como la incontinencia, aumenta el dolor premenstrual en pacientes con síndrome premenstrual, fatiga emocional y adicción5.
En conclusión, la ingesta moderada de café (preferentemente molido y sin azúcar), tiene excelentes beneficios que pueden mejorar nuestra vida diaria, pero también a largo plazo, por otro lado, cabe enfatizar que los beneficios de este residen en la moderación de las cantidades por día, así como del estado de salud del consumidor. Si bien, la hora del café es un momento relajante y divertido, no hay que olvidar que todo en exceso tiene un riesgo, pero también darse un gustito, no hace daño.
1Puertas Mejía MA, Villegas Guzmán P, Rojano Benjamín A.(2013) “Borra de café colombiano (Coffea arabica) como fuente potencial de sustancias con capacidad antirradicales libres in vitro”. Rev Cubana Plant Med. 2013 Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S102847962013000300013&lng=es
2 Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (S/F) “Café de México hacia los mercados de calidad “Visto en: https://info.aserca.gob.mx/claridades/revistas/103/ca103.pdf
3 CEDRSSA (2018) Reporte el café en México diagnóstico y perspectiva”. Marzo de 2018. Visto http://www.cedrssa.gob.mx/files/10/30El%20caf%C3%A9%20en%20M%C3%A9xico:%20diagn%C3%B3stico%20y%20perspectiva.pdf
4 Euromonitor International (2017). Análisis del Mercado de Consumo de Café en México 2016 Informe del Agosto 2017. Visto: https://amecafe.org.mx/wp-content/uploads/2017/08/Euromonitor_Informe_An%C3%A1lisis-de-consumo-2016-AMECAFE-Final.pdf
5 Valenzuela B. ,Alfonso el café y sus efectos en la salud cardiovascular y en la salud materna. Universidad de Chile y Facultad de Medicina, Universidad de los Andes. Santiago, Chile. Visto en: https://scielo.conicyt.cl/pdf/rchnut/v37n4/art13.pdf
6 Mesa Rodríguez, N. Yadira, Medrano M.Jacqueline ,Martínez P. Leonor M., Grave de PeraltaMariela , Cabrera H.Yunia. (2017) “Efecto anticariogénico del café”. vol.21 no.3 Holguín jul.-set. 2017. Visto en: https://scielo.conicyt.cl/pdf/rchnut/v37n4/art13.pdf
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